AUTOBIOCATURA
A propósito del título:
Con la riqueza expresiva del idioma castellano del que soy devoto admirador aunque humilde lego, me ha sido imposible encontrar una palabra que defina el contenido de este libro. Por ello, me he permitido crear un vocablo: «autobiocatura», con el que identifico la narración biógrafo-caricaturesca de uno mismo.
Narro las vivencias de aquellos tiempos en que me estaba formando, o deformando —según sea la visión personal de cada cual—, y que han hecho de mí lo que he podido ser.
Entiéndase que mi visión no es real, sino fruto de la mirada distorsionada de un personajillo burlón y excéntrico con el que me identifico. Reclamo el derecho a imaginar y a mentir con toda sinceridad.
El texto ha de leerse como se escucha a un bufón: con buen sentido del humor y con ironía.
He llegado a la edad en la que empieza a ser demasiado fácil prever el futuro y en la que algunos buenos amigos ya están entre los muertos.
Decepcionado al pensar que me iré de este mundo habiendo vivido en una sociedad que me da respuestas tontas a mis preguntas serias, y respuestas serias a mis preguntas tontas, me propongo escribir la verdad sobre mis memorias, tal como las he sentido, sin poner traba alguna a la hora de expresar mis pensamientos, denunciando el daño que a mí me han producido los falsos profetas, conscientes o inconscientes, y lo mucho que me ha costado superarlo, sin conseguirlo nunca del todo.
Mi historia tiene mucho en común con la de numerosos mallorquines de mi generación, y mis sentimientos son tal vez más universales.
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